La deforestación en la Amazonia disparó en agosto y septiembre. Fueron  devastados 1.626 km² de bosques, un aumento del 122% comparado a los mismos dos meses de 2013. Los análisis mensuales del sistema de alertas de deforestación llamado Deter, estaban prontos desde el 14 de octubre en el Inpe (Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales), el día 24 fueron enviados por el director del Inpe, Leonel Fernando Perondi, al Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.

En agosto, se deforestaron 890,2 km², un salto del 208% sobre los 288,6 km² del mismo mes de 2013. En septiembre se deforestaron 736 km², un 66% más que en septiembre del año pasado. En este primer bimestre del “año fiscal” de la deforestación amazónica, la tasa de aumento combinada fue del 122%.

Según la dirección del Ibama, el órgano evitó divulgar estos datos para evitar que fueran usados por el crimen organizado para huir de las acciones de fiscalización. El gobierno federal siempre resalta que el sistema Deter no fue creado para calcular áreas de deforestación acumulada. Su función es la de generar informaciones de inteligencia para orientar a los fiscales del Ibama sobre la tala ilegal.

Los datos oficiales más precisos y anuales salen de otro sistema, el Prodes. No existe una fecha marcada para divulgar ese informe anual (en este caso, del  intervalo entre agosto de 2013 y julio de 2014), lo que normalmente sucede en noviembre o diciembre.