En lo que parecerían unas condiciones climáticas idóneas para la ocasión, el satélite Earth Explorer (Explorador de la Tierra) CryoSat-2 ha completado su viaje hasta el Cosmódromo de Baikonur en Kazajstán, donde se preparará para el lanzamiento previsto para el próximo 25 de Febrero.
 
El satélite y los equipos de apoyo salieron en camión del centro de ensayos ‘IABG’ en Ottobrunn, Alemania, el pasado 12 de Enero.

La misión CryoSat está diseñada para monitorizar con precisión los cambios en el espesor de las placas de hielo que flotan sobre los océanos en las regiones polares, así como las variaciones del espesor de las capas de hielo que cubren Groenlandia y la Antártida. Mientras gran parte de Europa continúa afectada por uno de los inviernos más fríos de los últimos años, la nieve y el hielo parecen ambientar la primera etapa del viaje de CryoSat-2.  
 
La misión de la ESA para el estudio del hielo

A medida que los efectos del cambio climático se hacen evidentes, especialmente en las regiones polares, es cada vez más importante comprender exactamente cómo están respondiendo los campos de hielo de la Tierra. La disminución del espesor de la capa de hielo se cita comúnmente como una de las primeras consecuencias del calentamiento global y, dado que el hielo juega un papel fundamental en la regulación del clima y del nivel de los océanos, estos cambios pueden tener grandes consecuencias.
 
Para poder comprender con claridad cómo está afectando el cambio climático a estas regiones remotas pero altamente sensibles, se necesita con urgencia poder determinar cómo está cambiando exactamente el espesor del hielo, tanto del que está sobre tierra como del que está flotando sobre los mares. Al atender directamente a esta necesidad, los datos generados por la misión CryoSat conducirán a una mejor comprensión del papel que juega el hielo en el sistema de la Tierra.
 
Tras el lanzamiento de las misiones GOCE y SMOS, CryoSat-2 será el tercer satélite de la serie Earth Explorer de la ESA lanzado en los últimos 12 meses, dando un paso importante en la dedicación de la ESA para comprender mejor el sistema de la Tierra.

Fuente: ESA