Tras más de 10 años en servicio, Envisat ha interrumpido sus comunicaciones con tierra. El equipo de control de la misión de la ESA está trabajando para restablecer el contacto con el satélite. Este extraordinario satélite lleva en órbita el doble del tiempo inicialmente previsto para su misión, y la ESA tiene previsto mantenerlo operativo hasta que las futuras misiones Sentinel tomen el relevo.
El problema comenzó el pasado día 8 de abril, cuando en contra de lo esperado, el satélite permaneció en silencio durante su pase sobre la estación de seguimiento de Kiruna, en Suecia. Inmediatamente, el equipo de control de la misión declaró el satélite en emergencia y pidió la colaboración de todas las estaciones de seguimiento de la Agencia, repartidas por todo el mundo. Acto seguido se reunió a un equipo de ingenieros y especialistas en operaciones y en dinámica del vuelo.
En un esfuerzo conjunto, el equipo de recuperación, del que también forman parte expertos de la industria, pasó los siguientes días intentando restablecer las comunicaciones con el satélite. Si bien se sabe con certeza que Envisat permanece en una órbita estable, los intentos de establecer contacto con el satélite, a día de hoy, aún no han dado resultado. Siguiendo los protocolos estándar, un comité de investigación de anomalías está analizando las posibles causas del cese de las comunicaciones con tierra.
Misión Envisat
Envisat lleva en servicio cinco años más de lo inicialmente previsto. Desde su lanzamiento en el año 2002, este extraordinario satélite ha completado más de 50 000 órbitas, recogiendo miles de imágenes y una gran cantidad de datos fundamentales para estudiar y comprender mejor cómo está cambiando nuestro planeta. En esta década de operaciones, Envisat se ha convertido en un auténtico hito en la historia de la observación de la Tierra desde el espacio.
Envisat es sin duda el satélite de observación de la Tierra más complejo del mundo. Gracias a sus diez instrumentos ópticos y radar, este satélite insignia ha recogido información fundamental sobre la tierra, los océanos, la atmósfera y los campos de hielo. Sus observaciones, combinadas con las de las misiones ERS en servicio desde 1991, han permitido estudiar con precisión los efectos del cambio climático a lo largo de los últimos 20 años.
Actualmente, más de 4000 proyectos en 70 países están utilizando los datos generados por Envisat. Sus resultados continuarán estando disponibles. Gracias a un acuerdo con la Agencia Espacial Canadiense, Radarsat permitirá continuar atendiendo las necesidades de los usuarios mientras no se solucione el problema con Envisat.
Nuevos satélites
El primer satélite de la familia Sentinel, parte del programa europeo para la Monitorización Mundial del Medioambiente y la Seguridad (GMES), será puesto en órbita el año que viene. Los satélites Sentinel proporcionarán a los servicios de información los datos necesarios para mejorar la gestión medioambiental, comprender y mitigar los efectos del cambio climático y garantizar la seguridad ciudadana.
Fuente: ESA