Un consorcio formado por 11 empresas y organismos de ocho países trabajará durante dos años y medio en esta iniciativa, impulsada por la Comisión Europea dentro del 7º Programa Marco. El objetivo final es poner en manos de autoridades y expertos herramientas avanzadas que les ayuden a definir sus estrategias de desarrollo urbano.
Servicios geoespaciales se adaptarán a las necesidades específicas de diferentes ciudades, que se enfrentan a problemas y retos distintos, para lo que se cuenta con la participación de Amberes, Helsinki, Londres (Kensington y Chelsea), Madrid, y Milán como usuarios finales.
Decumanus cubrirá cuatro tipos de servicios principales. El primero de ellos está dirigido a ofrecer datos climáticos de la ciudad, que permitirán adaptar el desarrollo urbano a esta realidad. El segundo tipo permitirá realizar un seguimiento exacto del uso del suelo, un aspecto que afecta de forma directa a la temperatura y al clima en las distintas zonas.
Estos dos servicios se complementarán con el desarrollo de herramientas que faciliten información georreferenciada sobre la eficiencia energética en las distintas áreas. Se podrán detectar los lugares en los que se emite más CO2, las zonas en las que se pierde energía debido a una excesiva iluminación y los edificios que hacen un mal uso de sistemas de refrigeración o calefacción. Un último grupo de servicios ofrecerá información relacionada con la salud, lo que permitirá conocer, por ejemplo, la influencia del crecimiento urbano, el clima y la calidad del aire sobre la calidad de vida de los ciudadanos.
Con este proyecto, se da continuidad a distintas iniciativas de I+D llevadas a cabo en los últimos años en el ámbito europeo, dirigidas a explotar la información que recogen hoy en día satélites de observación de la Tierra y otros sensores.
Fuente: Indra Company