Los primeros trabajos de campo arrancarán a finales de este mes en territorios como Dagua, Yumbo y Jamundí.

El Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) y la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC) decidieron dividir el departamento de la caña de azúcar en cuatro grandes zonas para estudiar sus cuencas hidrográficas este año.

Así lo acordaron ambas entidades en el primer comité técnico, en el IGAC expuso el plan de trabajo de las visitas de campo, que consiste en adentrarse en espesas zonas montañosas, “penetrar” la tierra y tomar varias muestras para analizar su estado.

A finales de abril empezaría esta labor en la zona 1, ubicada en la parte centro y sur-occidental del departamento. Esta área, la más extensa del estudio, abarca aproximadamente 250 mil hectáreas de las cuencas del Dagua, Yotoco, Arroyohondo, Cali, Lili-Meléndez-Canaveralejo, Mulalo, Vijes, Yumbo, Claro, Timba y Jamundí.

Según el IGAC, está va a ser la primera en pasar al “tablero” porque actualmente es la que cuenta con la interpretación de datos y fotografías más avanzada.

En junio serían estudiadas las 184 mil hectáreas de la zona 2 (parte nor-oriental), compuesta por las cuencas de Mediacanoa, Piedras, Riofrío, Calima, Cañaveral, Catarina, Chanco, Pescador y Rut.

La zona 3, la segunda más extensa del estudio entre el IGAC y la CVC, iniciaría su estudio en agosto. Cuenta con más de 223 mil hectáreas de las cuencas de la parte oriental de Anaime, El Cerrito, Guabas, Guachal, Guadalajara, Sabaletas, Tulúa, Desbaratado, San Pedro y Sonso.

Finalmente, el IGAC espera recorrer la zona 4 en el mes de septiembre, la cual cuenta con 213 mil hectáreas ubicadas en la parte nor-oriental del departamento, distribuidas en las cuencas de Bugalagrande, La Paila, Las Cañas, Los Micos, Morales y Obando.

Según Juan Antonio Nieto Escalante, director general del IGAC, se espera culminar el estudio a finales del año. “Con esta información, la CVC podrá adelantar sus Planes de Manejo y Ordenamiento de Cuencas (POMCAS), ya que se identificarán el estado del suelo, el uso actual, la vocación, los impactos ambientales y hasta el grado de contaminación”.

Además, este análisis técnico a escala 1:25.000 permitirá planificar el territorio y dar soluciones a las problemáticas de los suelos de las cuencas hidrográficas a nivel de predios y fincas, y conocer detalladamente las áreas que se deben proteger y preservar, en dónde se permite la agricultura o ganadería, y hasta el tipo de cultivo más apropiado.

De las cuencas a estudiar dentro del convenio, las que cuentan con mayor área son Dagua (142 mil), Tulúa (70 mil), Bugalagrande (68 mil hectáreas), La Vieja (59 mil) y Amaime (55 mil).

 

Fuente: IGAC