Pese a ello, Brasil no cuenta con un estudio integrado de la vulnerabilidad de las ciudades costeras ante este fenómeno, según apunta un informe especial del Panel Brasileño de Cambios Climáticos (imagen: Ponta da Praia, en Santos, litoral de São Paulo/ Leandro Negro/ Agência FAPESP)
Pese a ello, Brasil no cuenta con un estudio integrado de la vulnerabilidad de las ciudades costeras ante este fenómeno, según apunta un informe especial del Panel Brasileño de Cambios Climáticos (imagen: Ponta da Praia, en Santos, litoral de São Paulo/ Leandro Negro/ Agência FAPESP)

El nivel del mar en la costa brasileña tiende a elevarse en las próximas décadas. Pese a ello, no existe en Brasil, donde más del 60% de la población vive en ciudades costeras, un estudio integrado de la vulnerabilidad de los municipios del litoral ante éste y otros impactos ocasionados por los cambios climáticos, tales como el aumento de la frecuencia y de la intensidad de las lluvias. Un estudio de tal naturaleza permitiría estimar los daños sociales, económicos y ambientales, y elaborar un plan de acción con el objetivo de implementar medidas adaptativas.

Éstas son las conclusiones que se desprenden del informe especial del Panel Brasileño de Cambios Climáticos (PBMC), en lo concerniente a “Impacto, vulnerabilidad y adaptación de las ciudades costeras brasileñas a los cambios climáticos”, presentado el pasado 05 de junio, durante un evento realizado en el Museo del Mañana, en Río de Janeiro.

La referida publicación cuenta con el apoyo de la FAPESP y una parte de los estudios en los cuales se basa surgen como resultado del Proyecto Metrópolis y de otros proyectos apoyados por la Fundación en el marco del Programa FAPESP de Investigaciones sobre Cambios Climáticos Globales (PFPMCG) y del Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología (INCT) para Cambios Climáticos, financiado también por la Fundación y por el Consejo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (CNPq).

“La idea del informe consistió en mostrar el estado de la arte sobre los cambios de clima y las ciudades costeras, con base en una exhaustiva revisión de publicaciones internacionales y nacionales sobre el tema, y también detectar lagunas en el conocimiento, para que los formuladores de políticas públicas y los tomadores de decisiones de Brasil puedan proponer e implementar medidas de adaptación”, declaró José Marengo, coordinador general de investigación y desarrollo del Centro Nacional de Monitoreo y Alerta de Desastres Naturales (Cemaden) y uno de los autores y editores del informe, a Agência FAPESP.

De acuerdo con datos del documento, entre 1901 y 2010 el nivel medio del mar aumentó 19 centímetros en términos globales, con una variación de entre 17 y 21 centímetros.

Entre 1993 y 2010, el índice de elevación correspondió a más de 3,2 milímetros (mm) por año, con una variación anual de entre 2,8 y 3,6 mm.

En Brasil también existe una tendencia al aumento del nivel del mar en las zonas costeras con algún grado de incertidumbre, pues no existen registros históricos continuos y confiables, según ponderan los autores.

“Aún no hemos logrado detectar el aumento del nivel del mar en Brasil, habida cuenta de las escasas observaciones existentes y la falta de estudios de modelado tendientes a evaluar los impactos. Pero mediante la realización de estudios regionales hemos identificado diversas ciudades de mediano y gran porte que exhiben una alta exposición a la elevación del nivel relativo del mar y que ya han sufrido los impactos de este fenómeno, particularmente bajo la forma de resacas e inundaciones”, dijo Marengo.

Entre estas ciudades, donde el 60% de la población reside en la franja de 60 kilómetros de la costa, se encuentran Rio Grande (en el estado de Rio Grande do Sul), Laguna y Florianópolis (Santa Catarina), Paranaguá (Paraná), Santos (São Paulo), Río de Janeiro (Río de Janeiro), Vitória (Espírito Santo), Salvador (Bahía), Maceió (Alagoas), Recife (Pernambuco), São Luís (Maranhão), Fortaleza (Ceará) y Belém (Pará).

En los estados de São Paulo y de Río de Janeiro, por ejemplo, se han registrado índices de subida del nivel medio del mar de entre 1,8 y 4,2 mm por año desde la década de 1950.

En la ciudad de Santos, en el litoral sur de São Paulo, donde se encuentra situado el mayor puerto de América Latina, el nivel del mar ha aumentado 1,2 mm por año en promedio desde la década de 1940. Asimismo, se ha registrado un aumento significativo de la altura de las olas –que llegaban a 1 metro en 1957 y pasaron a medir 1,3 m en 2002– y en la frecuencia de resacas en el municipio.

 

En tanto, en Río de Janeiro, el análisis de los datos de la estación mareográfica de Ilha Fiscal –en donde se encuentra la serie histórica más antigua de Brasil, y que está situada en el medio de la bahía de Guanabara– indica una tendencia de aumento promedio del nivel del mar de aproximadamente 1,3 mm por año, con base en los datos mensuales del nivel del mar del período comprendido entre 1963 y 2011 y con un índice de confianza de 95%.

En Recife, a su vez, el nivel del mar aumentó 5,6 mm entre 1946 y 1988, lo que corresponde a una elevación de 24 centímetros en 42 años. La erosión costera y la ocupación del post playa provocaron una disminución de la línea de playa de más de 20 metros en Praia de Boa Viagem –el área de la orilla marítima de mayor valor de la ciudad–, apuntan los autores del informe.

“Existen pocas observaciones como éstas en otras regiones del país. Cuando intentamos recabar datos de los últimos 40 ó 100 años referentes al aumento del nivel del mar en otras ciudades del nordeste, como Fortaleza por ejemplo, resulta difícil hallarlos”, dijo Marengo.

Los impactos socioeconómicos

De acuerdo con los autores del informe, los cambios climáticos, sumados a un acelerado ritmo de subida del nivel del mar, pueden provocar serios impactos en las áreas costeras de Brasil.

Los impactos socioeconómicos se restringirían más a las cercanías de las 15 mayores ciudades del litoral, que ocupan una extensión de 1.300 mil kilómetros de la línea costera, correspondiente al 17% de la línea costera total de Brasil.

Entre las principales consecuencias de la elevación del nivel del mar se encuentran el aumento de la erosión costera, de la frecuencia, la intensidad y la magnitud de las inundaciones, de la vulnerabilidad de los habitantes y de sus bienes y la reducción de los espacios habitables, entre varias otras.

“Los impactos más evidentes de la elevación del nivel del mar son el aumento de la frecuencia de las inundaciones costeras y el achicamiento de la línea de playa. Pero existen otros no tan perceptibles como la intrusión marina, cuando el agua salada del mar empieza a penetrar en acuíferos y ecosistemas de agua dulce”, subrayó Marengo.

Las proyecciones del Quinto Informe (AR5) de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) indican que la elevación del nivel del mar en términos globales variará entre 0,26 y 0,98 metro hasta 2100, en un escenario más pesimista. Y el informe presenta estimaciones similares para la costa brasileña.

Si se tiene en cuenta que la probabilidad de inundaciones aumenta con la elevación del nivel del mar, puede esperarse una mayor probabilidad de inundaciones en áreas que exhiben más de un 40% de cambios en el nivel del mar observados durante los últimos 60 años, tal como es el caso de varias metrópolis costeras brasileñas, según destacan los autores.

Las inundaciones costeras serán más preocupantes en el litoral de las zonas nordeste, sur y sudeste de Brasil, y también pueden afectar el litoral sur y sudoeste de la ciudad del Rio de Janeiro. De acuerdo con los estudios que se presentan en el informe, los seis municipios fluminenses más vulnerables a la subida del nivel del mar son Paraty, Angra dos Reis, Río de Janeiro, Duque de Caxias, Magé y Campos dos Goytacazes.

“La combinación del aumento del nivel del mar con tormentas y vientos más fuertes puede provocar daños bastante considerables en la infraestructura de esas ciudades”, estimó Marengo.

Un ejemplo de plan

En el documento se hace hincapié en el Plan Municipal de Adaptación al Cambio de Clima (PMAMC) de la ciudad de Santos como un ejemplo de plan de acción para la adaptación a los cambios climáticos y a sus impactos sobre las ciudades (lea más sobre el tema en: agencia.fapesp.br/22140).

La elaboración de ese plan se basó en los resultados del Proyecto Metrópolis, coordinado por Marengo.

En el estudio internacional se estimó que la inundación de áreas costeras de las zonas sudeste y noroeste de Santos, causada por la combinación de la elevación del nivel del mar con las resacas, las mareas meteorológicas y astronómicas y eventos climáticos extremos, puede ocasionar pérdidas acumuladas por valor de casi 2.000 millones de reales hasta 2100 de no implementarse medidas de adaptación.

Investigadores del Cemaden, de los institutos Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe) y Geológico (IG) y de las universidades de São Paulo (USP) y de Campinas (Unicamp) llevan adelante la investigación en colaboración con colegas de la University of South Florida, de Estados Unidos, y del King’s College London, de Inglaterra, además de técnicos de la Municipalidad de Santos.

“Nuestra intención es aplicar la metodología que se está utilizando en Santos en otras ciudades costeras brasileñas para hacer al menos una estimación inicial del costo de adaptación a la elevación del nivel del mar”, dijo Marengo.

 

Fuente: FAPESP