Después de un largo período de testeos, la industria rusa entró en fase de producción en serie de un nuevo sistema de navegación, basado en el Glonass, para la tecnología del control aéreo.

El nuevo sistema, llamado Puin, tiene el objetivo de sustituir el sistema existente de navegación aérea cuando éste presente fallas o disminución en su desempeño, teniendo carácter estratégico para los planes rusos de mejoría del sistema global de navegación por satélites Glonass.

Un total de casi 400 millones de dólares se destinaron para el proyecto Glonass solamente este año y un poco menos de 200 millones en 2006. Esto coloca en evidencia el gran interés ruso en tener el sistema totalmente operacional, lo que deberá ocurrir a fines de 2008.