Estimativas hechas por el SimAmazônia, programa de modelado computacional desarrollado para simular escenarios, están subsidiando la formulación de nuevas políticas públicas para la región amazónica, con vistas a la valoración de los servicios ambientales y, consecuentemente, al combate a la deforestación y a las emisiones de carbono en la atmósfera.
La base de datos del SimAmazônia llevó tres años para ser montada, con informaciones de fuentes como el censo del Instituto Brasilero de Geografía y Estadística (IBGE) y el Programa de Cálculo de la Deforestación de la Amazonia (Prodes), del Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (Inpe), y por mapas de aspectos físicos y viales, con los caminos vecinales de la región.
A partir del cálculo de millones de datos, ambientales y económicos, el SimAmazônia es capaz de crear modelos digitales para prever el comportamiento o la evolución ambiental de una región específica.
