Una nueva tecnología de navegación inteligente, que calcula la verdadera velocidad con la que se mueve un automovilista, en lugar de los estimados actuales, basados en la velocidad máxima autorizada, se convierte en último adelanto en materia de Sistemas globales de Navegación Satelital (GNSS).

La idea parece sencilla: para integrar todos los factores (semáforos, rotondas, etc.) que pueden influir en la duración de un viaje fue necesario colectar durante dos años, en España, los datos proporcionados por millones de usuarios anónimos, a lo largo de 10.000 millones de kilómetros.

En 50% de casos, el aparato aconseja un itinerario diferente y más rápido que el que habría aconsejado previamente.

La apuesta es de talla, ya que de 10% a 15% de las redes viales son modificadas cada año, e incluso un 40% en las zonas de alta densidad, lo que puede conllevar algunas sorpresas.

Hoy, los fabricantes de GPS compiten también contra los teléfonos celulares que incorporan la navegación en los equipos, con actualización en línea.

Fuente: AFP