Hasta ahora se sabía que Galileo había retrasado desde el punto de vista organizativo y presupuestario. Pero faltaba por concretar qué había fallado exactamente en un programa que ya ha absorbido más de 2.000 millones de euros de dinero público europeo y que, frente a un presupuesto inicial de 3.330 millones (sólo 1.800 de dinero público) puede acabar costando al contribuyente más de 5.500 millones de euros.

Pues a juzgar por el Informe presentado por el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea falló casi todo. Pero, sobre todo, Bruselas.

Los preparativos para aunar capital público y privado en el sistema de navegación por satélites "fueron inadecuados". La supervisión pública del desarrollo tecnológico del proyecto, "imprecisa". El presupuesto presentado por la Comisión en el año 2000, "incompleto".

Los auditores comunitarios señalan que la Comisión Europea "no dirigió el programa de forma pro activa, por lo que adoleció de falta de liderazgo".

El resultado fue que a finales de 2008, año previsto para comenzar a explotar comercialmente la señal de los 30 satélites de Galileo, "no se había lanzado ningún satélite operativo", según el Tribunal, "y las estimaciones de costes para la fase desarrollo y validación se habían prácticamente doblado, pasando de 1.100 millones a 2.100 millones". El proyecto acumula, además, "un retraso de cinco años en materia de desarrollo tecnológico".

Fuente: CindoDías