Geocaching es un deporte para quien tenga espíritu aventurero y cuya meta es encontrar un tesoro (cache) que alguien escondió en algún lugar.

Para cumplir el objetivo se necesita un GPS e ingresar a algún sitio de Geocaching para elegir por ubicación, grado de dificultad y tipo de cache. Ahí encontrarás las coordenadas y algunas pistas para llegar al premio, las que se deben ingresar en el dispositivo GPS a la hora de comenzar el viaje.

Pero las coordenadas nunca son exactas, sino que aproximadas. Por esa razón hay que buscar dentro de un radio y superar diversas dificultades impuestas por el territorio para descubrir el escondite.

Por lo general, el hallazgo consiste en una caja plástica con un regalo que va desde figuritas, libros, CDs, DVDs., alimentos no perecibles, mapas hasta grandes sumas de dinero.

Otro elemento que siempre se adjunta es un cuaderno de notas y un lápiz, donde el cazador de fortunas deberá anotar su nombre, la fecha del hallazgo y algún comentario. Una regla básica es tomar el tesoro y reemplazarlo por otro para que el próximo jugador no se quede sin su premio.

Sin embargo, quienes practican esta actividad aseguran que el regalo que allí encuentran no es la principal motivación, sino que la aventura completa: sortear obstáculos, desafiar la imaginación, conocer nuevos lugares y compartir la experiencia con otros geocachers.

Uno de los principios básicos del geocaching es el respeto por el entorno y por lo tanto hay que tratar de intervenir lo menos posible en él y recoger la basura que se encuentre en el camino.

Como recomendación, a parte del GPS, es bueno llevar zapatillas cómodas, agua, un mapa del lugar y una linterna. Además de avisarle a alguien a dónde se va a ir y cuándo se espera regresar.

Más informaciones: www.geocaching.com