China lanzó a su órbita el día 19 de noviembre el tercer satélite de la constelación “Environment I”, aumentando la capacidad del país para monitorear el ambiente y prevenir desastres.
El satélite radar se unirá a los dos satélites ópticos que están en operación desde setiembre de 2008. La constelación “Environment I” forma ahora una red que cubre la mayor parte del territorio chino.