Moya eVTOL, desarrollado y producido por la brasileña Moya Aero, ya realizó su primer vuelo y comenzó la campaña de pruebas para buscar la certificación para uso comercial. El avión destinado a aplicaciones profesionales estará expuesto a los visitantes de la Expo eVTOL, evento organizado por MundoGEO y que se realizará en el Expo Center Norte – Pavilhão Amarelo, en São Paulo, entre los días 21 y 23 de mayo.

La aeronave tiene 5,1 metros de largo, 7,4 metros de ancho y 1,8 metros de alto, y está construida principalmente con materiales compuestos, como fibra de carbono y resina epoxi, utilizando moldes para la laminación, lo que resulta en un menor peso.

El diseño del fuselaje del Moya eVTOL fue diseñado para reducir la resistencia y aumentar la eficiencia. Según la compañía, este diseño puede reducir la resistencia en un 50% en comparación con otras configuraciones de eVTOL del tipo lift+cruise.

El Moya eVTOL tiene propulsión 100% eléctrica, basada en baterías LiPo de 83 kWh que mueven cuatro rotores, dos delanteros y dos traseros, cada uno con una potencia de 62 kW.

Estas configuraciones dotan al Moya eVTOL de una autonomía de 110 km y una autonomía de 42 minutos, operando a una velocidad de crucero de 150 km/h.

eVTOL multimisión

El avión fue desarrollado para ser multimisión y operar en los campos de logística, agricultura y cartografía. Esta flexibilidad es una característica llamativa de Moya eVTOL y no es casualidad que ya haya atraído la atención de varios clientes de diferentes sectores. En Brasil, por ejemplo, Helisul mostró interés en 50 aviones para transporte de carga y Fototerra pretende utilizar los equipos para uso en fotogrametría aérea.

Para los operadores de carga, la aeronave proporciona una carga útil de 200 kg, lo que permite un amplio abanico de posibilidades logísticas, muy superior a los drones comunes que realizan este tipo de tareas. En el caso de uso agrícola, el Moya eVTOL puede transportar hasta 160 litros y pulverizar 105 hectáreas con una carga de batería.

El prototipo de avión comenzó a construirse luego de una contribución de US$ 2 millones de FINEP, organismo gubernamental brasileño dedicado a apoyar la innovación y la investigación. Y las expectativas de la compañía para los próximos diez años son tener ingresos de alrededor de 2 mil millones de dólares y ventas proyectadas de aproximadamente mil unidades en el período. La entrada en servicio está prevista para 2026.