La gran mayoría de la deforestación amazónica sucede en áreas sin catastro, donde no se sabe quienes son los dueños de las propiedades. La constatación fue hecha por el órgano ambiental del estado de Mato Grosso (SEMA), a partir de la comparación de imágenes satelitales con el banco de datos de las propiedades rurales registradas.
Del área total deforestada computada entre junio de 2004 y junio de 2005, el 71% no consta en el sistema de licenciamiento generado por el SEMA. "Apenas un 11% fue autorizado. La mayoría por lo tanto es ilegal", dice el asesor ejecutivo del órgano, André Longhi.
Las acciones de fiscalización no son suficientes para identificar a los infractores, que muchas veces no se los encuentra en el lugar o alegan haber adquirido la propiedad después de la deforestación.
Caos de la tierra
El caos de la tierra es el principal problema en la Amazonia. Es necesario integrar las bases de datos sobre las propiedades rurales existentes para que se sepa quién es dueño de qué porción de tierra.
Mato Grosso es el campeón histórico de desforestación en la Amazonia. Paradójicamente, es también el estado de la región con el mejor sistema de monitoreo por satélite de su territorio, que será copiado en otros estados.
Según el especialista en percepción remota Carlos Souza Júnior, del Instituto del Hombre y Medio Ambiente de la Amazonia (Imazon), la percepción remota de la Amazonia no es más el principal problema. "El tema del ordenamiento territorial es un gran cuello de botella. Necesitamos una base integrada de registro de las propiedades".
